miércoles, 11 de abril de 2012

¿Cómo afectan los portabebés en el desarrollo físico del bebé?

En la última publicación os estuve hablando sobre los portabebés y os hablé muy por encima de como favorecían en el desarrollo del bebé. Hoy quiero hablaros de cómo afectan los diferentes tipos de portabebés en el desarrollo “físico” de éste.

Antes de empezar a hablaros de cada tipo de portabebés, me gustaría hacer un pequeño resumen-recordatorio sobre las cualidades físicas que estos presentan al nacer:


Durante el transcurso de la evolución de la especie humana, pasamos de la cuadrupedia a la bipedestación. Esto indujo al enderezamiento de la columna y más tarde a la inversión de la curvatura lumbar. Cuando nacemos, la columna vertebral del bebé es cóncava. A los pocos meses de vida, cuando el bebé empieza a tener control cefálico, comienza a aparecer la lordosis cervical, a los 13 meses de vida y con la aparición de la bipedestación y la marcha, la columna pasa de ser cifótica a rectilínea. A partir de los tres años es cuando empezaremos a observar una ligera lordosis lumbar que se consolidará a los 8 años y se adoptará una cifosis definitiva a los 10 años de edad.
Lordosis cervical e inicio de la lumbar
Otra cosa que quiero comentar brevemente antes de empezar a hablaros de los diferentes portabebés es de la luxación congénita de cadera. La luxación congénita de cadera es la pérdida de congruencia de la cavidad cotiloidea y la cabeza femoral. Puede tener un tratamiento conservador, si es leve y quirúrgico si con el tratamiento conservador no se soluciona el problema y sigue la cadera o caderas luxadas. Se pueden usar algún tipo de órtesis que se colocan dentro del pañal para mantener las caderas del bebé en abducción (que es la posición en la cual la cabeza femoral está totalmente en contacto con la caviudad cotiloidea, existen unos tipos de arneses que le mantienen la posición o el simple “doble pañal” que es tan conocido por las mamis con bebés con problemas).
Después de este breve recordatorio, os voy a empezar a hablar de alguno de los diferentes tipos de portabebés que existen, y de cómo afectan en el desarrollo físico:
Primeramente os voy a hablar de las mochilas portabebés. Las podeis encontrar de varias marcas: Chicco, Babybjorn, …  Estas mochilas consisten en unos tirantes que van desde la espalda hacia delante y una cincha lumbar,  unidos a la cesta portabebés que llevaremos sobre nuestro tórax y abdomen. Este tipo de mochila ha estado evolucionando y siguen investigando el cómo mejorarlas para que la postura del bebé sea adecuada. Las nuevas mochilas portabebés llevan un soporte para la cabeza  muy importante,  porque los primeros meses de vida el bebé no tiene aun control cefálico (control de la cabeza) y podría ser peligroso que se quedara la cabeza colgando. Estos tipos de portabebé-mochila, también incluyen un soporte lumbar para la madre, el cual lo podrá poner a su medida y colocar el bebé lo más cerca del cuerpo posible, para que las lumbares no sufran tanto, aunque no recomiendo ningún tipo de mochila portabebés cuando la madre sufre lumbalgia (sobretodo en la fase aguda).

Los inconvenientes que le veo a este tipo de mochila-portabebés convencionales son: la posición de las piernas del bebé no es la adecuada, ya que se le sujeta al bebé desde la pelvis quedando las piernas colgando, si el bebé tuviera una luxación o cualquier otro tipo de enfermedad congénita en la cadera no podría usarla. El porqué de no poder usarla es que al llevar las piernas colgando la cabeza femoral no está totalmente dentro de la cavidad cotiloidea y no facilitaría o no ayudaría a la recuperación de la enfermedad. Lo adecuado sería que se le sujetara al bebé por el muslo (en la parte distal) para que las piernas quedaran en abducción (piernas abiertas), con las rodillas flexionadas y a un nivel superior de la articulación de la cadera (posición de ranita).
Aunque el bebé no tenga ningún tipo de patología en las caderas, es recomendable que las lleve en esta posición para evitar que se pueda luxar y así poder llevar un desarrollo más satisfactorio.
Por esto, este tipo de portabebés no me gusta nada en este aspecto.
También me han comentado que estos tipos de portabebés son bastante dificiles de poner y se suele necesitar ayuda para ponértelos, aunque poco a poco van mejorando y van siendo más prácticos.
Otro de los inconvenientes que veo es que todo el peso del bebé, como antes he comentado, se encuentra sobre la pelvis y por lo tanto sobre los genitales del bebé. Esto puede provocarle problemas en el aparato reproductor en un futuro o cualquier tipo de patología. Me parece un aspecto muy importante también a tener en cuenta.

Antes de empezar a hablaros de los otros tipos de portabebés que existen, he de deciros que no todos los portabebés mochila que existen son como os he comentado; si quereis adquirir uno de estos debeis fijaros y tener muy en cuenta en cómo le sujeta las piernas al bebé y dónde cae todo el peso de su cuerpo, también en que tenga un soporte para apoyar la cabeza y que el bebé pueda mantener la postura cifótica (en C) de la columna vertebral hasta que empiece a desarrollar.
En cambio hay otro tipo de portabebés que son ergonómicos, como son: los fulares portabebés, bandoleras de anillas, mai tais, furtais, ombuinos, pouchs,los paños africanos, bambará y algún tipo de mochila ergonómica. Este tipo de portabebés pienso que tienen más que ofrecer hacia el desarrollo del bebé y hacia el bienestar de la madre, ya que son más fáciles de poner (no se necesita ayuda para colocarlos, sólo un poco de práctica), se puede ajustar a la envergadura y cuerpo de la mamá con el bebé sin ningún tipo de problema, el bebé mantiene una postura más correcta con la columna en C, la cabeza bien sujeta apoyada sobre el pecho de la mamá o papá y sujeta por el fular o portabebés elegido (colocándolo bien) y el peso del cuerpo sobre la parte distal de las piernas (no ocasionando así ningún tipo de patología en los genitales)… Es decir, mantiene la postura en ranita del bebé correctamente.
Personalmente, como fisioterapeuta pienso que estos portabebés son más prácticos y más beneficiosos para la madre y para el correcto bienestar y desarrollo del bebé.
A continuación os adjunto fotos de alguno de los tipos de portabebés ergonómicos:
Fular portabebés
Bandolera de anillas
Bambará (portabebés africano)
Os vuelvo a comentar en que en la página web de la Red Canguro podéis echar un vistazo de los diferentes tipos de portabebés que existen, cómo usarlos, el modo de colocación según la edad, y podéis poneros en contacto con ellos por aquí o vía Facebook o Twitter y ellos os atenderán encantados. También recordaros que una vez al mes en Alicante en el Centro Social de entreplayas de Playa San Juan, frente al Hotel Mío Cid (el último sábado del mes) se reunen y dan charlas informativas para todo el mundo que quiera acudir. En Facebook se pueden consultar los distintos Grupos Locales existentes y las actividades a realizar por cada uno de ellos.
Si quereis leer la otra publicación en la que hablo de los beneficios de usar los portabebés y sobre el método canguro solo teneis que pinchar aquí .
Espero que os sirva para informaros y si os puedo ayudar en alguna cosa, también os pongo mi mail: anna_adsuar@hotmail.com
Anna y Alexander

martes, 10 de abril de 2012

Hablamos de pies...

En el momento del nacimiento los pies son como un libro abierto, en el que lo único que hay impreso es el prólogo, el resto de sus hojas están en blanco, esperando ser escritas con cada paso que da el Ser Humano recorriendo el camino de su vida.
Los pies de un bebe sano, son rosados, tienen un perfume natural, no tienen grietas, ni raspaduras, son suaves al tacto, representan la transparencia, la tranquilidad, la felicidad y la armonía de una nueva vida que empieza su desarrollo. Al igual que cada bebé es diferente de otro, sus pies también lo son.
En la medida que el bebé crece y va siendo un niño, sus pies, empiezan a tener marcas diferenciadoras…
Unos tendrán los pies con forma más cuadrada otros con forma más triangular, con los talones más anchos o más estrechos, con las uñas finas o gruesas, anchas o alargadas, curvadas o planas algo que ya se esbozaba en el momento de nacer y que cada vez se va haciendo más evidente.
Según se camina hacia la edad adulta, y se van llenando las páginas en blanco del libro de la vida con los pasos personales, los pies, se van haciendo diferentes en cada individuo, van variando con los cambios internos que la persona realiza, quedando reflejados en los pies; si son vivencias positivas, con signos positivos y si le acompañaron experiencias negativas, también habrá marcas impresas que lo constaten.
En las personas de edad avanzada podemos observar que los pies reflejan todo el camino recorrido
En ese libro abierto que son los pies podemos leer su personalidad, ver descrita su inteligencia, temperamento, carácter, estructura biológica y los aprendizajes más fuertemente adquiridos, por lo general en la temprana infancia y los aprendizajes y adecuaciones comportamentales que el sujeto realiza más tardíamente y en muchos casos conscientemente.
En definitiva los pies nos narran la historia de la vida del ser humano. Toda su madurez o inmadurez, su tipo de consciencia, responsabilidad, dependencia o independencia, rigideces, agotamiento y un sinfín de experiencias vividas, algunas traumáticas y no siempre emocionalmente resueltas, quedan proyectados en sus pies.
Los pies se desenmascaran las raíces de los desajustes y alteraciones, recientes o lejanos en el tiempo que son producto de bloqueos, que están más allá, de lo meramente físico y que en cualquier caso, han dejado su impronta en la persona, y antes o después, aparecerán en forma de alteraciones orgánicas dentro de la triada: mente, órgano, emoción. 

El terapeuta aprende a ver más allá del personaje… ve lo autentico de la personalidad del ser que va a tratar. Entiende lo que cuentan los pies con su forma, sus deformaciones, durezas, callos, grietas, sequedad, humedad, flexibilidad, rigidez, marcas, etc.
Al mostrárselo al paciente, este puede tomar conciencia de sus partes ocultas, de su “sombra”.
Tras ayudar al paciente a descubrir el origen de los problemas, este empezará a darse cuenta de cosas que antes no podía ver y esto le ayudará a modificar sus hábitos personales.
Después se trabajan zonas y puntos reflejos concretos para que desde estos, se produzca la liberación de bloqueos y toxinas, logrando que sus estructuras, órganos, emociones y mente se equilibren y alcance un grado de armonía y bienestar, que irá conduciendo al restablecimiento de su Salud.
Con la observación desapegada y la exploración, el terapeuta puede llegar a los rincones más ocultos de la persona tratada, esto es sinónimo de llegar…¡A los rincones más ocultos de su alma!

Extraído de Isabel Pérez Broncano